El
28 de julio de 1874 nació en Montevideo el pintor uruguayo Joaquín Torres
García. Su infancia transcurre en el ambiente del almacén y del taller de
carpintería de su familia. Sintió su
vocación por el arte a los doce años. Luego viajó con su familia a España, la
patria de sus padres. Allí realizó estudios de pintura entre 1892 y 1896, para
luego empezar un camino propio en ese arte.
La
plástica y la literatura siempre estuvieron juntas en él, como formas de
expresión. Fue escritor, ensayista, polemista y maestro. Leía mucho y pasaba
largas horas visitando museos o asistiendo a conciertos. Cuando falleció su
padre, en 1901, empezó a trabajar con el famoso arquitecto Antonio Gaudí. En
esa época dio clases particulares de dibujo, ilustró libros y conoció a su futura
esposa, Manolita Piña y Segura.
A partir de 1920 vivió en Nueva York y en distintas ciudades de Italia y Francia, hasta que pasó a radicarse a Madrid. Regresó al Uruguay en 1934. Tenía el ideal de impulsar un artepropio e inédito para el continente americano. Un arte moderno que mezclara las expresiones artísticas propias y los postulados del “Constructivismo”. Dijo: "Toda América debe levantarse para crear un arte poderoso y virgen".
A partir de 1920 vivió en Nueva York y en distintas ciudades de Italia y Francia, hasta que pasó a radicarse a Madrid. Regresó al Uruguay en 1934. Tenía el ideal de impulsar un artepropio e inédito para el continente americano. Un arte moderno que mezclara las expresiones artísticas propias y los postulados del “Constructivismo”. Dijo: "Toda América debe levantarse para crear un arte poderoso y virgen".
Sus
curiosos ojos comenzaron desde muy pequeño a interesarse por la realidad,
recorriendo la gran Plaza de Carretas. Siempre había en ella al menos unas 500
carretas que traían animales, cuero, lana, trigo, maíz, y muchos productos. Personas
de poncho y chiripá, siempre con el rebenque en la mano, eran la figura más
pintoresca. De su madre recibió lecciones básicas de lectura y escritura, desarrollando
un profundo y disciplinado interés por el estudio, en una actitud autodidacta
que habrá de acompañarlo por el resto de su vida. De adolescente dirigirá su
interés hacia el dibujo y la pintura. Nació pintor. Jamás había visto a nadie
pintar, excepto a los pintores de paredes.
La
realización de juguetes transformables de madera pintada ha sido, dentro de la
vasta obra del gran artista uruguayo, uno de los episodios más atrayentes de su
vida ya que, inicialmente, Torres García los creó – junto a un pequeño teatro
con sus escenografías – para contarles historias a sus propios hijos. Los
juguetes tienen más de lo que las personas se imaginan. Los juguetes tienen un contenido, diseño y
material, tan importante como el de su obra”.
Autos
deportivos, arlequines, pájaros articulados, pequeños felinos, aves de granja,
elefantes, jirafas , mujeres y hombres de diversos colores, ferroviarios y un
caballito mecánico denominado “Go Pony” son sólo algunos de los juguetes
desmontables creados por este gran artista. Pequeñas obras de arte que no sólo
sirven para jugar, sino también para aprender y crecer . “Si el niño rompe sus
juguetes , es, en primer término, para investigar ; después para modificar:
conocimiento y creación. Démosle pues, los juguetes a piezas, y que haga lo
que quiera”.
“El trato con los niños en las escuelas y lo
que iba observando en sus propios hijos , hizo pensar alguna vez a Torres
García en los juguetes, pareciéndole que allí había algo que estudiar y crear
que estuviese más de acuerdo con lo que debía ser. Sabía él que nada puede
reemplazar a las cosas naturales (agua, tierra, madera) con que se divierte y
adquiere habilidad y conocimiento el niño, pero puesto que construyen juguetes,
al menos que sean en relación con la psicología infantil. Y, viendo entonces
que nada, por el momento, podía esperar del arte, y queriendo crearse una
situación independiente, pensó en fabricar juguetes.
La
historia de este hombre es increíble, viajó por el mundo, por la creación y por
el arte. Fue constante en su búsqueda y tuvo que sobreponerse a muchas
pérdidas, entre ellas el incendio de su taller. Una experiencia única que
puedes seguir conociendo. Para más información puedes visitar www.torresgarcia.org.uy .
Aquí
una muestra de sus trabajos.